OTRAS FORMAS DE NARRARME

Brincando el Charco de Frances Negrón-Muntaner (1994)


por Sofía Hansen

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Lo que es - es de mucho interés - comenzar desde el principio - saber qué es la “narrativa” - qué era la narrativa. El diccionario sugiere que la narrativa es “esa parte de una escritura o documento que relaciona los hechos relevantes ... un cuento o hechos recitales”. Para 1826, esta definición había llegado a incluir “hablador” - un cambio interesante que me llamó la atención. Así que verifiqué la palabra “cuento” y me dijeron que “cuento” proviene del holandés “taal”, que significa discurso
— Lis Rhodes en el libro “Telling Invents Told”, capítulo “New Forms in Non-narrative Film”*

“Brincando el Charco” es una película cargada de formas subjetivas. Probablemente porque el tema del cual trata el film constantemente abarca la representación de identidades. La voz en off que continuamente articula la película está rodeada de preguntas. La misma voz de Claudia (Frances Negrón-Muntaner) se encuentra cuestionando y generando un discurso desde lo incierto. Claudia viaja desde Puerto Rico para vivir a Estados Unidos, alejándose de ciertas identidades y creando otras. “I don't even know how to feel” dice, casi al comienzo de la película. Podríamos llamarle protagonista, sin embargo, dado que se trata de una película cuyo discurso se va expandiendo mientras avanza, se podría decir que la verdadera protagonista es la pregunta “¿Cómo me identifico a mí misma siendo parte de la otredad**?”. La película es sobre Claudia, pero también sobre todos los otros cuerpos que se muestran en ella.

“Brincando el Charco” es en sí misma una mezcla de formas. Una mezcla de registros que al convertirse en una unidad temporal y espacial son difíciles de identificar. Es sencillo trocear la película y distinguir a qué tipo corresponde cada uno, sin embargo, al ser un conjunto, ocurre la posibilidad de un lugar nuevo. Encontramos un autorretrato, una ficción, un melodrama y partes documentales articulando la película. El film también es un espacio en donde distintos formatos se encuentran: imágenes de archivo, fotografías, fotogramas congelados, la ficción en sí misma, video analógico, intertítulos y entrevistas. 

Sintiéndome intrigada por la forma en que las palabras cambian -o se cambian- y cómo tendemos a colisionar “narrativa” con ficción en prosa y ficción en prosa con película, pensé que no solo es la “narrativa” interesante, ya que se ha visto en relación con el film, pero también cómo se escucha, cómo se narra la narrativa, la representación de las voces de quiénes controlan qué imágenes, qué “recital de hechos” son permitidos de ser hablados -cuyos significados, por lo tanto, son permitidos significar.
— Lis Rhodes en el libro “Telling Invents Told”, capítulo “New Forms in Non-narrative Film”***

Los distintos acercamientos formales que genera la película hacia la narrativa rompen esquemas al hacer visible la otredad (desde el lesbianismo, feminidad y critica de color) en la pantalla. La película sugiere distintas maneras de mostrar estos cuerpos en cada plano, en cada escena.

Comienza una entrevista. Vemos a una mujer hablando, terminando con la frase “¿somos todos iguales en Puerto Rico?”. Claudia se desviste y entra a la ducha. Comienza un montaje alternando, por un lado, una compilación de material de archivo de cuerpos que se encuentran en un festival afro-americano y por otro lado, el cuerpo de Claudia en el agua. Imagen tras imagen vemos cuerpos los cuales conectan con una frase, como una resonancia, que estará durante todo el film: “Un cuerpo con muchos puntos en contacto”. Toda la diáspora**** mestiza proveniente de otras tierras, se extiende y aparece como si fuera una.

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“Pero aquí, cubierta por la tierra de quién soy prisionera, siento el palpitar de la muerte bajo mis pies” escribió Ana Mendieta en los 80’s refiriéndose al trabajo que hacía en relación a la naturaleza, el barro, y las rocas: para ella la tierra no era un lienzo, era un territorio emocional por el cual corre la vida de cualquier inmigrante. En el momento en que Frances Negrón-Muntaner utiliza las imágenes de su cuerpo para articularlas con las imágenes de archivo mencionadas anteriormente, lo hace no utilizando su cuerpo como un lienzo, sino desde un territorio emocional que dialoga con el concepto que ella misma crea mientras vemos las imágenes del festival afro-americano: “extranjeros familiares”.

Las éticas y estéticas de la película se consolidan con la propia narrativa del film. Es un constante juego de formas, una experimentación de ideas, y como película experimental (que, desde mi perspectiva, atenta contra lo que Laura Mulvey advirtió: “La mujer como imagen, el hombre como portador de la mirada”) deberíamos hablar sobre cómo es representado el cuerpo de Claudia, los cuerpos latinos, afro-americanos y afro-latinos; la otredad.

Si es que la representatividad está ligada con la identidad, ¿cuál es mi identidad si es que no me veo representada?. Ivone Margulies analiza cómo el feminismo y lo Otro tiene cabida dentro de la narrativa experimental. Dice "La representación del cuerpo omitió por completo la motivación psicológica y la identificación del espectador, alentando la narrativa o un nexo de ideas”*****. Margulies formula una pregunta en el contexto de generar nuevas narrativas experimentales feministas, en la cual la construcción de las identidades y la construcción de los personajes es absolutamente delicada: “si los personajes individuales están demandados de la necesidad de representar una identidad colectiva, ¿cómo se puede crear una representación positiva y potencialmente plural que, sin embargo, no pretenda alcanzar un estado totalizado?”.

“Brincando el Charco” se encuentra constantemente generando preguntas y formas abstractas. Claudia se cuestiona a sí misma e interpela (y en consecuencia nosotros mismos interpelamos) las imágenes de archivo que la rodean. Vemos la historia de Claudia, pero también vemos (desde su perspectiva) la historia de la otredad (los otros cuerpos disidentes que van apareciendo en pantalla).

Claudia se ve enfrentada a su privilegio, pero a la vez a su opresión generando así nuevas visiones, nuevos puntos de vista. La película muestra una representatividad plural, pero no alcanza un nivel totalizado porque no se encarga de reproducir lo visible, sino de hacer visible******.

America, what a formidable fiction.

* “What is - is of much interest - to begin at the beginning - is to know what “narrative” is - what narrative was. The dictionary suggest that narrative is “that part of a deed or a document that relates the relevant facts... a tale or recital facts”. By 1826 this definition had come to include “garrulous” or “talkative” - an interesting change that caught my attention. So I checked the word “tale” and was told that “tale” comes from the Dutch “taal” which means speech”. (Lis Rhodes in the book “Telling Invents Told”, chapter “New Forms in Non-narrative Film”). 
** Según Foucault, la “otredad” tiene relación con “lo Mismo y lo Otro”. “La historia de la locura sería la historia de lo Otro - de lo que, para una cultura, es a la vez interior y extraño y debe, por ello, excluirse (para conjurar un peligro interior), pero encerrándolo (para reducir la alteridad); la historia del orden de las cosas sería la historia de lo Mismo -de aquello que, para una cultura, es a la vez disperso y aparente y debe, por ello, distinguirse mediante señales y recogerse en las identidades.” (“Las palabras y las cosas", Michel Foucault en el Prefacio).
*** “Feeling intrigued at the way words change - or are changed - and how we tend to collide “narrative” with prose fiction and prose fiction with film, I thought not only is “narrative” interesting as it has come to be seen in relation to film but also how it is heard - how narrative is narrated - the representation of whose voices control which images - which “recital of facts” is allowed to be spoken - whose meanings are therefore allowed to be meant”. (Lis Rhodes in the book “Telling Invents Told”, chapter “New Forms in Non-narrative Film”).
**** Valentina Alvarado Matos define: “La diáspora se vive, por ejemplo, en la búsqueda de connacionales en el lugar de llegada, en la recontextualización de costumbres, en os canales de comunicación con el lugar de origen, en la vivencia virtual, en la imaginación constante. Podrían ser algunos de los mecanismos para conservar vigente aquella matriz a la distancia”. (Valentina Alvarado Matos en “Apuntes cruce postal: el otro nuevo viaje”.)
***** “Nothing Happens, Chantal Akerman´s Hyperrealist Everyday”, por Ivone Margulies.
****** Paul Klee.