¿Quiénes son más descarados y más rebeldes que aquellos que nos parieron y nos criaron?

En cada videoclip hay una máquina del tiempo personal que nos lleva al momento de la pieza o a un momento nuestro, en que la vida nos sucedía de otra manera.

El ayer aparenta ser una planta progreso en un jarrón. La sensación conservada es ahora una abstracción de corte y confección que se reconstruye cada vez que la recuerdo.

Polaroids y versos de preguntas acentuadas por la cuarentena.

Son sólo un grupo de derrotados absolutamente todos los cínicos.

Las reinvenciones musicales de Taylor van más allá de una necesidad de permanecer relevante; son su constante diálogo y recepción del mundo que la rodea.

Desde entonces, he atravesado desiertos a lomos de un cocodrilo gigante; navegado contra el clima hasta las aguas del fin del mundo; combatido oponentes a los que luego les hice canciones (…)

A principios del confinamiento, en un presente detenido y un futuro incierto, me encuentro en el pasado, acogida por imágenes que en 1974 tomó Bichara, mi abuelo paterno.

¿Hasta dónde podemos afirmar que El Perseguidor de Julio Cortázar es puro jazz?

La vida es extraña, la vida es caótica y ninguna línea narrativa es más leal a la vida y a esta etapa de crecimiento, que una narrativa caótica.

Hay entonces que cultivar el espíritu por una libertad mucha más grande que la nuestra.

“Si todo es camino, todo es presentimiento”, afirma Julien Gracq.

Pensándolo bien, un juego como éste nunca termina; una historia y una ejecución de esta naturaleza se queda con vos, para siempre.

Si te gusta leer, leé El Quijote de la Mancha. Si te gusta el cine, mirá Ciudadano Kane. Si te gusta la vida, jugá Witcher 3: Wild Hunt.